Renault..

Imaginemos que nos compramos un coche.. bueno, en realidad sólo medio, porque la otra parte la compra Botín, que insiste mucho en que quiere invertir en el proyecto, no vaya a ser que acabes siendo el nuevo Alonso Quijano ese.

Imaginemos que ya lo tenemos y que todo está perfecto y estás encantado de la vida, y una buena mañana, una "Torda" (también era pestrucha, pero no me parece relevante para el desarrollo de la historia), que admite que estaba dormida y que no miró mientras se te echaba encima provoca un buen golpe que estropea un poco la parte delantera y hace saltar airbags, pretensores y demás. Ya tenemos montado el lio de grua, policía, Botín llamando para saber si el motor está afectado.. etc.
Con un poco de suerte, tras un mes y con las dos últimas semanas con un Modus color caca como sustituto, recuperamos el bólido.
Todo parece estar perfectamente, incluso la exagerada factura que le han pasado al seguro por cerca de 6.000 € parece legal.

Ahora comienza lo interesante. Al cabo de dos meses, te levantas un buen día para participar en el desfile diario que la asociación de domingueros de tú ciudad organiza, y el puto botón de arranque no responde. Consultas con el padock, y decides salir ese día con el segundo coche, y que los mecánicos revisen el problema.

Tras dos días en el concesionario, y sin contestar a la fácil pregunta de que es lo que se ha estropeado, te dicen que es un cable que ha fallado, que probablemente se haya dejado mal en la reparación.. o bueno, tal vez que se haya estropeado sólo. ( Alguien sabe cómo se estropea un cable?..). Te dan dos opciones, o bien dejas el coche en el taller esperando a que llegue la pieza que hace falta sustituir, o te hacen una ñapa tipo "empalme" (esto debe salirles bien, lo digo por los pedazo de huevos que tienen), y así puedes ir "tirando" hasta que llegue la pieza. Decides ésto último, y confirmas que en cuanto te llamen para sustituir la pieza, y que revisen un crujido que empieza a ser muy molesto, te vas de allí con un Modus color caca para seguir participando en los desfiles.
Tras más de una semana de espera, recibes la pertinente llamada para que el próximo Lunes te pases por allí. Como ya sabes como funciona esto, confirmas de nuevo que te dejarán sin problemas el Modus color caca. Evidentemente, cuando llegas el Lunes a dejar el coche, el jefe de taller, no podía ser de otra manera, tras atenderte en todo momento con unos exquisitos modales estilo "rústico de abaixo" se indigna cuando le dices que si no hay Modus caca, no hay Megane.

El siguiente paso es comunicarselo al comercial, ( Alfredo, para los lectores asiduos), y ver como te dá la razón y como te asegura que él lo arregla todo.

Como ya estamos un poco cansados, pasamos a modo estricto, y le comunicamos que: el coche no va a salir del taller de nuevo, sin que se verifique que la instalación de encendido ha sido cambiada, que el ruido tipo Gandalf hablando en la lengua de Mordor que sale de la columna central cese por completo, que el tapizado de la zona del copiloto sea colocado correctamente, y je,je que la tapa de plástico que lleva el motor con la motorización, no sea la de otro coche que al menos tenía 3 años..

Imaginemos, que si tras una reparación que en principio no afectaba en absoluto partes mecánicas e importantes del vehiculo, aparecen cuatro defectillos a tús ojos; imaginemos, que han sido casualidades y no hay otros cuatrocientos escondidos al acecho, y esperando a aparecer cuando menos te lo esperes.

Bueno, tampoco todo es negativo, cuando llamo por teléfono al concesionario, la chica que atiende el teléfono tiene un voz agradable.



Una foto de los mecánicos de la Renault.