Panorámica de Vondelpark, Amsterdam. Pulsa para verla en grande.

16 noviembre 2007

Una historia cotidiana cualquiera..

Hola de nuevo; como es obvio hace un montón que no me paso por aquí.
El motivo, es un desaliño autoafligido de locuacidad y un desdén ganador hacia algo que realmente no lleva a nada.

Realmente no voy a hacer honor a lo que reza el título del post, tan sólo quiero dejar una foto que me ha parecido curiosa. La hice ayer con el móvil en casa de unos señores y me llamó mucho la atención. Al menos lo suficiente para ponerla aquí.

(Intr.)

Aquella tarde hacía frio; las hojas perennes jugueteban entre sí arremolinandose en el medio de la calle. Se palpaba la quietud y la calma de los arrabales, y nada hacía presagiar lo que estaba a punto de ocurrir.

De un modo tácito entré en la casa, y mi despistada e inocua mirada, se posó repentinamente sobre la fotografía.

El marco que la resguardaba, estaba colocado de un modo estudiado encima de un bureau corriente, en la entrada de la casa. Increiblemente desprendía por sí sólo una mágica y centelleante luminosidad que llenaba toda la estancia, y que irrefrenablemente captaba mi total atención.

Tan sólo en mi angosta memoria recordaba una situación similar; aquella vez por el 2004 en la National Gallery de Londres, cuando entré en la sala donde se exponía una de las pinturas de Los girasoles de Van Gogh.

No tuve tiempo apenas para pensar.
Suddenly, algo poderoso surgió fugazmente de dentro de mi; primitivo e intrínseco a un instinto desconocido hasta el momento por mi ser.
Preso de esta sensación extraña y a la vez excitante tomé del bolsillo rápidamente el teléfono, apagué el sonido que imita un obturador, me acerqué al objetivo con sigilo y decisión, y disparé.

Tras ese instante que siempre recordaré por su indudable transcendencia, tan sólo un pensamiento se repetía en mi mente, cual eco en el acantilado de la angustia:
" Tengo que poner esta foto en internet"





No en serio, hay que joderse. No voy a perder el tiempo en analizar la fotografía ni tampoco en decir lo que pienso ya no de hacerse por encargo esta foto de época, ni de luego ponerla con dos cojones en la entrada de tu casa para que todo el mundo la vea. Me imagino las conversaciones que surgen cuando reciben a sus invitados y amigos a partir de la foto de marras.. sólo con eso ya se dice todo.
En fin, la clase media está condenada a este tipo de cosas.
Si no se es.. no se es.

P.D. Que bien me lo paso. Si, la foto es auténtica.

2 Opiniones:

Blogger Lycette Scott ha murmurado..

Interesante... Pasando a saludar

2:57 p. m.  
Anonymous Anónimo ha murmurado..

vaya, vaya, tu recomendación de pasarme por tu blog me ha llevado a la confirmación de uno de mis pensamientos menos democráticos (el cual compartimos en groso modo)

cada día se demuestra el poco gusto estético (y a veces ético) de la clase media a la que pertenecemos; que se vuelve loca por horteradas que huelen a falso abolengo, por el nuevo estilo "rústico gallego", o por la recargación costante de objetos inútiles salidos de este consumismo de segunda.

ya hablaremos de lo lícito que es sacar fotos en una casa a la que eres invitado, jeje... pero, en todo caso, la foto lo justifica!!!

9:10 p. m.  

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